08/02/20

11:49 p.m.

Por: . | Fuente: HispaniaMartyr.org

Sacerdote y Mártir

Martirologio Romano: En Barcelona, España, Beato José Guardiet y Pujol, sacerdote diocesano; asesinado por odio a la fe. ( 1936)

Fecha de beatificación: 13 de octubre de 2013, durante el pontificado de S.S. Francisco.

El Doctor Josep Guardiet i Pujol nació el día de la fiesta de san Luis Gonzaga de 1879 en Manlleu, industriosa villa de la plana de Vic en la que su padre era farmacéutico. Cursó estudios eclesiásticos en el seminario de Vic, siendo ordenado en 1902. Se doctoró en Teología en la Universidad Pontificia de Tarragona.

Cómo era el Doctor Guardiet

El celo por la gloria de Dios y la salvación de las almas de sus parroquianos le devoraba como a Elías. Su actividad parroquial era incansable; decía: “procuremos tener siempre más trabajo que el que podamos hacer”.

Cuando regía la parroquia del Espíritu Santo en Tarrasa, en una excursión con los jóvenes, pasando por Rubí, exclamó proféticamente: “¡Rubí, Rubí, quien pudiera vivir en tu pueblo y dar por ti su sangre!” Los jóvenes le replicaron: -“¿Sabe que es un pueblo muy malo?”. Él respondió: “Nadie es del todo bueno; yo siento este deseo apostólico”. En 1917 era nombrado párroco de San Pedro de Rubí, y veinte años después iba a cumplirse este su deseo.

Predicador y catequista incansable. Enérgico y emprendedor a la vez que bondadoso y afable, rebosante de creatividad pastoral, austero y servicial, sacrificado y caritativo hasta el extremo.

Le llamaban el párroco de la sonrisa por su proverbial amabilidad, su sentido del humor. Firme pero siempre dispuesto a concitar voluntades, hizo que su parroquia se convirtiera en modelo, y el Doctor Guardiet en el rector por antonomasia del obispado. Su rectoría era la casa de todos. No tenía horas de despacho porque era un continuo entrar y salir de gente, y dejaba el plato de comida sobre la mesa para atender de inmediato al visitante. Decía: “La comida puede esperar, pero el feligrés no debe”.

La catequesis de los niños para su primera comunión era su más grata actividad. Decía: “Un niño que recibe la comunión es más feliz que San José teniéndolo en brazos, porque es mejor comerse una manzana que tenerla en las manos.”

Organizador de mutiudinarias peregrinaciones a Lourdes y otros santuarios marianos, secundó la iniciativa del Obispo D. Manuel Irurita, como uno de los más entusiastas organizadores de la Primera Diada Catequista Interdiocesana en Montserrat el 25 de junio de 1933.

La persecución religiosa en su fase legal

Llegada la República, el Ayuntamiento de Rubí prohibió el toque de campanas. Hombre de iniciativas y soluciones, para suplir los toques el Dr. Guardiet ideó y puso en práctica la iluminación de los ventanales del campanario a base de distintos colores, según la festividad o acto que se quería anunciar. Si se celebraba bautizo, la luz era blanca; si boda, luz rosada; si exequias de párvulos, luz azul; si la defunción era de un adulto, luz violeta; para anunciar fiestas solemnes, luz roja, y para fiestas sencillas luz verde. Muchos de sus parroquianos llegaron a conocer el significado de las luces indicadoras mejor que el vetado tañido de las campanas. Su iniciativa tuvo resonancia internacional, y una revista católica inglesa dirigida por el famoso Gilbert K. Chesterton, con su peculiar humor británico, hizo un elogioso comentario de la ingeniosa novedad.

Intransigente con las ideas y amable con los equivocados, decía: “Hemos de ser implacables con el error, aunque condescendientes y respetuosos con las personas que lo sostienen.”

Mantuvo digna postura ante las autoridades de la villa por su radicalismo en la cuestión de los entierros religiosos, que ponían obstáculos a las declaraciones de los difuntos, firmadas en vida de querer ser enterrados católicamente, so pretexto de defectos de forma, obligando a retirarse a los sacerdotes del cortejo fúnebre.

La Alcaldía prohibió la tradicional procesión mariana de final del mes de mayo. El Dr. Guardiet publicó la siguiente nota:

“La Alcaldía notifica a la Parroquia que con el fin de mantener el orden público no tiene por conveniente se celebre la procesión anunciada para esta tarde. La Parroquia ha de procurar secundar siempre el mantenimiento del orden público y ha de ayudar al Ayuntamiento en su tarea por conseguirlo. Por ello la Parroquia no sólo obedece la voluntad de la Alcaldía, sino que se adelanta, y suprime también la Procesión del Corpus de este año .

Si el temor de perturbación del orden público viniese de parte de los fieles de la Parroquia, ésta sabría impedirlo y garantizar su mantenimiento, pero no cree la Parroquia que se le pueda culpar del peligro de perturbación, siendo la entidad que más manifestaciones de carácter público ha organizado en la villa y fuera de ella, y nunca éstas han perturbado el orden, y así seguirá pasando.

En la tarde de hoy celebraremos con solemnidad la conclusión del mes de María y la bella fiesta de la Primera Comunión dentro de la iglesia.

En la tarde del día del Corpus, también dentro del templo celebraremos fiesta solemnísima, y desde la mañana estará expuesto Nuestro Señor, a quien harán vela voluntaria todos los adoradores que tiene en Rubí. Jesús se quedará este año dentro de la iglesia, por el temor de que saliendo perturbe el orden público, Él que es la pacificación de los espíritus y de los pueblos.”

En Julio de 1936 comienza la fase sangrienta de la persecución religiosa

Ramón Ratés, hombre de ideas opuestas a las del Dr. Guardiet, escribe en su libro “Memories d’un cafeter”: “Comenzada la guerra civil y tras algunos asesinatos… supe que se proponían matar al Dr. Guardiet, y por primera y única vez, de prisa y corriendo, me fui a la rectoría para ofrecerle refugio en mi casa, el lugar más seguro, porque nadie sospecharía que estuviese escondido en casa Ratés. El hombre, conmovido, me abrazó y me dio las gracias, pero rehusó el ofrecimiento.”

El Doctor Parellada, médico de Rubí, la mañana del día 19 de julio fue a buscar al Dr. Guardiet al Casal Popular donde presidía una reunión de la Juventud Católica Femenina, para decirle que a las tres cerraban la frontera, que se marchaba y que si no se iba con él ya no tendría tiempo de marchar. El Dr. Guardiet le dio las gracias y declinó la invitación “Mi sitio está junto a mis feligreses”, le dijo.

El lunes día 20 de julio abrió la iglesia y dio la Comunión cada cuarto de hora, como hacía siempre. Pero al llegar la noche gente amenazadora se apostaba en torno de la Parroquia. El Vicario Mn. Josép Tintó, testigo de los hechos, y que pudo salir con vida, relata lo sucedido:

Un tiro a media noche fue la señal de ataque convenido. Momentos después llamaba estrepitosamente a la puerta de la casa rectoral un numeroso grupo de gente armada exigiendo las llaves del templo y la presencia del "Señor Guardiet".

Se presentó conmigo en la plaza; le obligaron a abrir la Iglesia y encender las luces. La mayoría de los asaltantes se mostraban cohibidos ante la serenidad y autoridad moral del Dr. Guardiet, pero, instigados por el que capitaneaba el grupo, irrumpieron atropelladamente en el templo.

El Dr. Guardiet se dirigió al jefe de los asaltantes y le pidió autorización para retirar el Santísimo Sacramento a su casa. El jefe se la dio.

Una vez en la rectoría miraba por una ventana preguntándose esperanzado si se limitarían sólo al saqueo, pero el ruido de apilar los bancos, las explosiones de las botellas de líquido inflamable y los primeros fogonazos de las llamas que consumían en pocos instantes la obra de muchos siglos, desvanecieron su esperanza.

El Dr. Guardiet pasó ante Jesús Sacramentado en amistoso coloquio las cuatro horas que faltaban hasta el amanecer, disponiéndose para el martirio que sabía próximo. Al apuntar el nuevo día, en una de sus reacciones características que reflejan su personalidad, bajó a la plaza completamente solo con un cubo de agua con la vaga esperanza de salvar lo poco que restaba por destruir. Volvió por otro cubo una y otra vez hasta que uno de los revolucionarios que quedaba por allí, amistosamente le convenció de que en interés de todos volviera a la rectoría. Acató, pues tras los sufrimientos de aquella noche ya poco le importaban la detención, la cárcel y la muerte.

Detención, prisión y muerte

El martes 21 le detenían, y entre un griterío amenazador le llevan a la cárcel de Rubí. Allí pasó 15 días rezando y dando consuelo religioso a los demás detenidos.

El tres de agosto, a las tres de la madrugada, unos milicianos forasteros le sacan de la cárcel y con otros dos vecinos de Rubí le llevan a la carretera de San Cugat al Tibidabo, la sangrienta Arrabassada, y le asesinan en lugar conocido por el Pi Bessó (el pino gemelo).

En su recuerdo se erigió en 1939 un monolito de piedra, que en los últimos años ha sido profanado repetidas veces, pero que otras tantas, los celosos “Amigos del Doctor Guardiet” de Rubí, lo han restaurado y lo mantienen siempre ornado con flores.

Sus venerables despojos fueron inhumados en el Cementerio del Sudoeste de Barcelona, y en 1945 trasladados a su querida Parroquia de San Pedro de Rubí, junto al altar de la Virgen de Montserrat de la que fue gran devoto.

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Sacerdote y Mártir

Martirologio Romano: En distintos lugares de España, Beatos Fortunato Velasco Tobar y 13 compañeros, de la Congregación de la Misión;asesinados por odio a la fe ( 1934-1936)

Fecha de beatificación: 13 de octubre de 2013, durante el pontificado de S.S. Francisco.

Salazar de Amaya es una aldea burgalesa asentada a la sombra de la Peña Amaya, testigo del nacimiento de Castilla, era 894.

En ella nació el P. Gutiérrez el 11 de noviembre de 1886. Sus padres se llamaron Juan y Vicenta.

De temperamento muy en, consonancia con el paisaje bra­vío que le vio nacer, desde chico fue de famosos hechos y no santos.

Para muestra, todo un señor botón.

Cuando él tenía diez años, cierta mujer del pueblo sor, prendió a Andrés Avelino y a otro guaja haciendo una trave­sura gorda y los reprendió severamente y aun diz que les in­sultó más de la cuenta. Con buena gentecilla se metió la pobre. La molieron a golpes; tanto, que, creyéndola muerta, la tira­ron a un arroyo, y gracias a que en el hilillo de agua que por él corría halló la infeliz su resurrección.

Pero el cachorrillo se dejaba domar y aun gobernar por la mansedumbre de una corderilla, su hermana, algo mayor de edad. A ella debió —es confesión propia— que su Primera Comunión fuera ejemplarísima; a ella, el haberse aprendido, como nadie, el Catecismo; a ella, la vocación religiosa.

Porque, sí, señor; con asombro inaudito de todos los veci­nos de Salazar, un día corrió por el pueblo este clamor: “¡An­drés se ha ido fraile!”

Y para fraile se metió a estudiar en la Escuela Apostólica de Tardajos.

A punto estuvo de darles la razón a sus paisanos, que de­cían: “¡Ese, fraile! No tardará en volver ¡Es imposible que persevere tan buena pieza!” Y el caso fue que “le picó la mosca”, sin que le aprovecharan, ni poco ni mucho, los conse­jos sabios de los respetables y reverendos Padres, sus profe­sores; mas Dios, que cuando quiere aprovecha incluso con el veneno, se sirvió de un apostoliquillo para reducir al rebelde, cuando mismo, maleta en mano, se disponía a abandonar el Colegio.

Terminados felizmente sus estudios de humanidades, in­gresó en, el noviciado de la Congregación de la Misión, el año 1903. Pronunciados a su debido tiempo los santos votos, es­tudiada la Filosofía en Hortaleza y la Teología en Madrid, aun sin recibir las sagradas Órdenes, fue destinado como pro­fesor al Colegio de Limpias. Sobre su conducta durante el es­tudiantado nada de especial es de advertir, si no son algunos borbotones de su carácter violento, sobre los que hay que echar mi velo de indulgencia. Nada tiene de extraño, que la fierecilla se revolviera y mordiera las cadenas con que su fuer­za de voluntad la aprisionaba. Y no disimulamos —nótese bien—en nuestros biografiados sus defectos, precisamente para destacar más el efecto de la gracia divina, que sale boyante entre el mar furioso de pasiones que en el hombre o la mujer nacen como las espinas en la tierra.

Al año de su estancia en Limpias se’ ordenó. Su actuación como profesor fue brillantísima y eficacísima. Su sola mirada llamaba al orden a los colegiales. Alguien dijo entonces que tres como el P. Gutiérrez bastaban para regir mi ejército de colegiales.

Desde 1917 a 1930 estuvo de residencia en Tardajos, con destino a las Misiones en la provincia de Burgos, en, los últi­mos años como Director. Para la predicación misionera se dis­ponía concienzudamente: nunca se repetía, afirma un -testigo. Su talento, extraordinario, y su erudición, abundante, exqui­sita, no le dispensaba, en su recto juicio, del estudio constan­te. No manojo, sino maraña de nervios, era exageradísimo en los gestos, aunque con los años se fue moderando. Sudaba en­tre témpanos de nieve y gritaba con desafuero: en una Nove­na-Misión que predicó en, el Santuario de los Milagros, decía la gente: “Pensa, pensa, que con berrar está todo feito.” Decía mal su bravura con fa melosidad gallega. Él era trompeta y aun trombón que sonaba demasiado fuerte en la terriña de las gaitas. En Burgos se le llamaba “El Padre Tareas.”

Desde 1930 a 1933 estuvo destinado en la ciudad de Oren­se, dedicado al servicio de la iglesia encargada a la Comuni­dad; pero más a la predicación de los Preceptos y otros ser­mones sueltos en los pueblos de la provincia.

Mediando el año 1933 fue trasladado a Gijón. Aquí le es­peraba la Providencia divina —serutans corda et renes Deus ­para otorgarle el singular privilegio del martirio.

¿Cómo fue?

Terrible.

Apuntemos los datos conocidos. Uno de sus asesinos fue detenido en Valencia, a poco de terminada la guerra, y se le obligó a recomponer la escena.

El motivo ocasional de su detención lo refiere así el Padre Lozano:

“… El P. Gutiérrez fue un día llamado por teléfono. ¿Fue una penitenta? Así le dijeron, y él se lo creyó cumplidamente. Quienquiera que fuese, comenzó por preguntarle si estaba en el puerto el crucero Cervera. El barco en cuestión era enton­ces el terror de Gijón. Sin darse cuenta de ello y de que los teléfonos todos estaban intervenidos, el Sr. Gutiérrez contestó al interlocutor dando toda suerte de detalles sobre la presencia del barco y algunas de sus características técnicas. Media hora después, los ridículos milicianos, que tantos días les habían visitado, se presentaban en casa preguntando por él y se lo llevaban para no volver. Por la noche, ya se comentaba que había estado en complicidad con el Cervera.”

3 de agosto. Invención del cuerpo del Protomártir San Es­teban. Esta es la fecha.

Y el monte de San Justo, a poca distancia relativamente de Villaviciosa, trasunto del Calvario. A su falda se paró el coche fatal. Largo había sido el paseo.

Las fieras, al ver en su cubil a la víctima, ¡cómo gozan! ¡Y se regodean! Despiértanse instintos de trogloditas. Hay de­talles canibalescos.

Con gran rapidez se apearon los milicianos, la gavilla de esbirros, y a empujones le hicieron bajar al P. Gutiérrez.

La subida al monte, penosa y triste, pero piadosa. “Iba hablando solo”, decía el asesino Fraisón. Por lo visto, rezaba. Llegaron más arriba de “La Venta de la Rana”. Y el león hecho cordero, camino de su inmolación, tenía presente la imagen del Inmaculado. ¡Tantos años aprendiendo la lección de mansedumbre que El tanto ponderó poniéndose como Maes­tro de teoría y práctica! Su geniazo, reprimido muchas veces, mas nunca debilitado, que con tanta frecuencia había servido de ejercicio de paciencia a los hermanos, se había embotado al fin. Genio y figura, dicen, hasta la sepultura. Se equivocó el refrán por esta vez. En aquellos meses en que se veía a las bestias revolucionarias tejer con febril empeño los últimos plin­tos de la urdimbre maldita, el P. Gutiérrez dio un cambiazo. Su pasión dominante cayó hecha una piltrafa. Había logrado, en fiera lid, total victoria.

Por eso, ante el Comité de El Llano guardó silencio y no desmenuzó entre sus uñas al desgraciado presidente, Campa­nal, que Dios haya perdonado.

Por eso, no rechinaron ya sus dientes cuando le insultaban, o le cacheaban desvergonzados, o le maltrataban.

Por eso, cuando ellos blasfemaban, él rezaba. Y por lo bajo, sin afán de reto, sin alarde corajudo.

Por eso, tranquilamente, santamente, cristianamente, subía y subía por la senda que él trabajosamente abría entre la maleza del monte de San Justo.

Antes que él se cansó el tropel de bárbaros.

Y sonó la descarga cerrada. Era la rabia del infierno con­vertida en pólvora.

Resonaron los tiros en los cercanos “casines”.

¡Ay! De ninguno de ellos surgió una Verónica.

Pero han guardado una frase de incalificable fiereza: —”No hay tiro de gracia; que sufra y se…”

Era un lunes, por la mañana.

El sadismo de aquellos tigres se satisfizo largo rato, vién­dole padecer, entre cuchufletas, sarcasmos y burlas.

Al fin, se fueron los criminales.

Y las horas de espantosa agonía continuaron. A voces pedía auxilio. Sus alaridos repercutían a lo lejos; mas sólo las mon­tañas los recibían compasivas. Los humanos de los contornos, que los oían,-eran menos impresionables que las piedras. Diz que temían a los rojos emboscados.

Pero, no; que para robarle el reloj ya tuvieron ánimo. ¿No sería consigna infernal no rematarle para que se des­esperase?

Mas el Ángel Consolador estaría a su lado, como hizo en el Huerto de Getsemaní, cuando el Divino Agonizante quiso con el sudor de su sangre regar la tierra. De las ramas de los ar­bustos entre los cuales cayó el P. Gutiérrez cuelgan rubíes, que son las gotas de su sangre, y con ellas empurpura también el suelo.

¡Trágica estampa la que ofrecía el pobre malherido: incor­porándose y volviendo a caer, siendo inútiles todos sus esfuer­zos por levantarse y echar a andar!

Todavía, al cabo de tres años, se notaba el hoyo que su pie hiciera, al servir en vano de palanca para la erección. Expiró.

De Villaviciosa vino el carro de recoger las basuras de la calle, para transportar el cadáver.

Abochorna el decirlo, pero es menester; que se entienda de qué indignidades somos capaces los civilizados, si Dios nos deja de su mano.

Y es que el carretero, al conducirlo, pegaba palos al cadá­ver, diciendo “¡Me c… en tu alma!”…

El lugar del espantoso crimen y del triunfo admirable está hoy acotado: una reja lo circunda y en su centro se levanta airosa la Cruz redentora.

En el Cementerio Ceares, de Gijón, descansan los restos gloriosos del invicto Mártir. Fueron a él trasladados al termi­nar la guerra en Asturias.

En el Cielo está su alma. Porque sufrió la prueba, ha reci­bido la corona de la vida, prometida por Dios a los que le aman.

BIOGRAFÍAS DE MISIONEROS PAULES Edición 1942
Autor: Elías Fuente

Este grupo de mártires está integrado por:

1. TOMÁS PALLARÉS IBÁÑEZ
sacerdote de la Congregación de la Misión (Vicenciano)
nacimiento: 06 Marzo1890 en Iglesuela del Cid, Teruel (España)
martirio: 13 Octubre 1934 en Oviedo, Asturias (España)

2. SALUSTIANO GONZÁLEZ CRESPO
hermano de la Congregación de la Misión (Vicenciano)
nacimiento: 01 Mayo 1871 en Tapia de la Ribera, León (España)
martirio: 13 Octubre 1934 en Oviedo, Asturias (España)

3. LUIS AGUIRRE BILBAO
hermano de la Congregación de la Misión (Vicenciano)
nacimiento: 13 Septiembre 1914 en Murguía, Vizcaya (España)
martirio: 30 Julio 1936 en Alcorisa, Teruel (España)

4. LEONCIO PÉREZ NEBREDA
sacerdote de la Congregación de la Misión (Vicenciano)
nacimiento: 18 Marzo1895 en Villarmentero, Burgos (España)
martirio: 02 Agosto 1936 en Las Planas de Oliete, Teruel (España)

5. ANDRÉS AVELINO GUTIÉRREZ MORAL
sacerdote de la Congregación de la Misión (Vicenciano)
nacimiento: 11 Noviembre 1886 en Salazar de Amaya, Burgos (España)
martirio: 03 Agosto 1936 en Gijón, Asturias (España)

6. ANTONI CARMANIÚ MERCADER
sacerdote de la Congregación de la Misión (Vicenciano)
nacimiento: 17 Agosto 1860 en Rialp, Lérida (España)
martirio: 17 Agosto 1936 en Llavorsi, Lérida (España)

7. FORTUNATO VELASCO TOBAR
sacerdote de la Congregación de la Misión (Vicenciano)
nacimiento: 31 Mayo 1906 en Tardajos, Burgos (España)
martirio: 24 Agosto 1936 en Alcorisa, Teruel (España)

8. RICARDO ATANES CASTRO
sacerdote de la Congregación de la Misión (Vicenciano)
nacimiento: 05 Agosto 1875 en Cualedro, Orense (España)
martirio: 14 Agosto 1936 en Gijón, Asturias (España)

9. PELAYO JOSÉ GRANADO PRIETO
sacerdote de la Congregación de la Misión (Vicenciano)
nacimiento: 30 Julio 1895 en Santa María de los Llanos, Cuenca (España)
martirio: 27 Agosto 1936 en Gijón, Asturias (España)

10. AMADO GARCÍA SÁNCHEZ
sacerdote de la Congregación de la Misión (Vicenciano)
nacimiento: 29 Abril 1903 en Moscardón, Teruel (España)
martirio: 24 Octubre 1936 en Gijón, Asturias (España)

11. IRENEO RODRÍGUEZ GONZÁLEZ
sacerdote de la Congregación de la Misión (Vicenciano)
nacimiento: 10 Febrero 1879 en Los Balbases, Burgos (España)
martirio: 06 Diciembre 1936 en Guadalajara (España)

12. GREGORIO CERMEÑO BARCELÓ
sacerdote de la Congregación de la Misión (Vicenciano)
nacimiento: 09 Mayo 1874 en Sitios, Zaragoza (España)
martirio: 06 Diciembre 1936 en Guadalajara (España)

13. VICENTE VILUMBRALES FUENTE
sacerdote de la Congregación de la Misión (Vicenciano)
nacimiento: 05 Abril 1909 en Reinoso de Bureba, Burgos (España)
martirio: 06 Diciembre 1936 en Guadalajara (España)

14. NARCISO PASCUAL y PASCUAL
hermano de la Congregación de la Misión (Vicenciano)
nacimiento: 11 Agosto 1917 en Sarreaus de Tioira, Orense (España)
martirio: 06 Diciembre 1936 en Guadalajara (España)

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Por: . | Fuente: Lasalle.org // Sallep.net

Religioso y Mártir

Martirologio Romano: En territorio de la Arquidiócesis de Madrid, España, Beatos Alberto María Marco y Alemán y 8 compañeros de la Orden de los Carmelitas de la Antigua Observancia; Agustín María García Tribaldos y 15 compañeros del Instituto de los Hermanos de las Escuelas Cristianas, asesinados por odio a la fe. ( 1936-1937)

Fecha de beatificación: 13 de octubre de 2013, durante el pontificado de S.S. Francisco.

El joven Eleuterio, de cuerpo frágil pero de alma ardiente, reveló, al entrar en el Noviciado Menor de Bujedo, sorprendente energía. No hacía falta repetirle una indicación; cada palabra de un profesor o vigilante tenían para el autoridad suficiente para obedecer sin vacilación ni retraso.

Dotado de buena inteligencia y tenacidad no común, alcanzó tos primeros puestos en los exámenes. Sus progresos en la piedad iban a la par de los estudios. No escatimaba esfuerzo en el cumplimiento de su deber. Sus buenas disposiciones se irán consolidando en los años de su formación religiosa y profesional; cuando llegó la hora de llevar la buena nueva a los niños, se encontraba dispuesto a derramar en sus almas infantiles Io que desbordaba de Ia suya. Inauguró su misión de educador en el colegio de Ntra. Sra. de las Maravillas, de Madrid donde permaneció tres años.

Después se encargó el Hno. Eleuterio Román de la clase superior del Noviciado Menor de Griñón.

En posesión de varios diplomas oficiales, amasaba cada día el pan de sus lecciones, antes de distribuirlo a sus alumnos. Enemigo de conversaciones ociosas, se mantenía ocupado por deber profesional y más aún por respeto a la Regla. Por el contrario, en los recreos y paseos se complacía en bromas y animaba la conversación con palabras edificantes.

Enviaron después al Hno. Eleuterio Román a la comunidad de Puente de Vallecas; era allí el más antiguo y por ello reemplazaba al Hno. Director en sus ausencias y todo seguía funcionando con regularidad. Tímido y reservado por naturaleza, se mostraba irreductible en lo fundamental y exigente en lo que suponía era su deber.

Las frecuentes revueltas del barrio de Puente de Vallecas afectaban profundamente al Hno. Eleuterio Román por su temperamento nervioso. Pero nunca salió de su boca un calificativo duro contra el furioso populacho, cegado por la pasión. Sólo Dios sabe la angustia de su corazón en la tremenda noche en que, a las once, fue necesario consumir las Sagradas Especies, mientras fuera bramaba el clamor de la multitud y el estampido de los disparos de la fusilería. Sintió más que nadie la angustia mortal de los Hermanos, cuando se vieron en la calle, rodeados de los revolucionarios y sin saber dónde refugiarse.

Algunos lograron por fin ocultarse y librarse de los sin Dios. Pero el Hno. Eleuterio Román no tardó en ser reconocido y llevado a la cárcel. Como el Real Profeta, "había amado la justicia y odiado la impiedad"; por ello mereció la gracia, beatificada por el divino Maestro, de la persecución y del martirio.

Fue fusilado en odio a la fe en Madrid el 3 de Agosto de 1936. Su muerte está testificada por la fotografía nº 9.3, expuesta en la Dirección General de Seguridad, que hemos comprobado poco después de estos acontecimientos.

Murió a los 39 años, 23 de vida religiosa y 14 de profesión perpetua.

Este grupo de mártires está integrado por:



1. EUGENIO GARCÍA TRIBALDOS (AGUSTÍN MARÍA), religioso profeso de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos de La Salle)
nacimiento: 13 Julio 1877 en Vellisca, Cuenca (España)
martirio: 30 Julio 1936 en Madrid (España)

2. MIGUEL SOLAS DEL VAL (ANSELMO PABLO), religioso profeso de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos de La Salle)
nacimiento: 08 Mayo 1890 en Briviesca, Burgos (España)
martirio: 30 Julio 1936 en Casa de Campo, Madrid (España)

3. ALEJANDRO GONZÁLEZ BLANCO (BRAULIO JOSÉ), religioso profeso de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos de La Salle)
nacimiento: 23 Julio 1890 en Villovieco, Palencia (España)
martirio: 30 Julio 1936 en Casa de Campo, Madrid (España)

4. PABLO DÍAZ DE ZÁRATE y ORTIZ DE ZÁRATE (NORBERTO JOSÉ), religioso profeso de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos de La Salle)
nacimiento: 21 Enero 1892 en MuruaCogoitia, Álava (España)
martirio: 30 Julio 1936 en Casa de Campo, Madrid (España)

5. GUILLERMO ÁLVAREZ QUEMADA (OSEAS), religioso profeso de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos de La Salle)
nacimiento: 10 Febrero 1890 en Sta. Cruz de la Salceda, Burgos (España)
martirio: 30 Julio 1936 en Casa de Campo, Madrid (España)

6. LUIS HERRERO ARNILLAS (ESTEBAN VICENTE), religioso profeso de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos de La Salle)
nacimiento: 22 Agosto 1893 en La Serna, León (España)
martirio: 30 Julio 1936 en Casa de Campo, Madrid (España)

7. JUAN LANZ PALANCA (CRISÓLOGO), religioso profeso de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos de La Salle)
nacimiento: 11 Agosto 1880 en Pamplona, Navarra (España)
martirio: 30 Julio 1936 en Casa de Campo, Madrid (España)

8. ELEUTERIO MANCHO LÓPEZ (ELEUTERIO ROMÁN), religioso profeso de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos de La Salle)
nacimiento: 20 Febrero 1898 en Fuentes de Valdepero, Palencia (España)
martirio: 03 Agosto 1936 en Puente Vallecas, Madrid (España)

9. JUAN LUCAS MANZANARES (BRAULIO CARLOS), religioso profeso de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos de La Salle)
nacimiento: 10 Diciembre 1913 en Campillo Lorca, Murcia (España)
martirio: 23 Febrero 1937 en Puente Vallecas, Madrid (España)

10. IGNACIO GONZÁLEZ CALZADA (ROGACIANO), religioso profeso de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos de La Salle)
nacimiento: 31 Julio 1885 en Terrazos de Bureba, Burgos (España)
martirio: 24 Julio 1936 en Madrid (España)

11. JOAQUÍN RODRÍGUEZ BUENO (IRENEO JACINTO), religioso profeso de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos de La Salle)
nacimiento: 20 Agosto 1910 en Mazuelo de Muñó, Burgos (España)
martirio: 22 Julio 1936 en Almudena, Madrid (España)

12. VICENTE LÓPEZ y LÓPEZ (VIRGINIO PEDRO), religioso profeso de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos de La Salle)
nacimiento: 27 Octubre 1884 en Miraveche, Burgos (España)
martirio: 22 Julio 1936 en Almudena, Madrid (España)

13. PEDRO BRUCH COTACÁNS (ANASTASIO PEDRO), religioso profeso de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos de La Salle)
nacimiento: 30 June 1869 en Gerona (España)
martirio: 14 Septiembre 1936 en Hortaleza, Madrid (España)

14. ALBERTO JOSÉ LARRAZÁBAL MICHELENA (JUNIÁN ALBERTO), religioso profeso de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos de La Salle)
nacimiento: 04 Febrero 1893 en Irún, Guipúzcoa (España)
martirio: 7 Septiembre 1936 en Arganzuela, Madrid (España)

15. EUSEBIO ANGULO AYALA (LUIS VICTORIO), religioso profeso de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos de La Salle)
nacimiento: 14 Diciembre 1894 en QuintanillaValdegovia, Álava (España)
martirio: 7 Septiembre 1936 en Arganzuela, Madrid (España)

16. RAMIRO FRÍAS GARCÍA (VIDAL ERNESTO), religioso profeso de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos de La Salle)
nacimiento: 13 Marzo 1906 en Villajimena, Palencia (España)
martirio: 28 Noviembre 1936 en junto al cementerio de Vicalvaro, Madrid (España)

17. DANIEL GARCÍA ANTÓN (DANIEL MARÍA), clérigo profeso de los Carmelitas de la Antigua Observancia
nacimiento: 11 Deciembre 1913 en Navacepeda de Tormes, Ávila (España)
martirio: 18 Agosto 1936 en Carabanchel Bajo, Madrid (España)

18. SILVANO VILLANUEVA GONZÁLEZ (SILVANO MARÍA), clérigo profeso de los Carmelitas de la Antigua Observancia
nacimiento: 06 Febrero1916 en Huérmeces, Burgos (España)
martirio: 18 Agosto 1936 en Carabanchel Bajo, Madrid (España)

19. ADALBERTO VICENTE MUÑOZ (ADALBERTO MARÍA), clérigo profeso de los Carmelitas de la Antigua Observancia
nacimiento: 23 Abril 1916 en Cuéllar, Segovia (España)
martirio: 18 Agosto 1936 en Carabanchel Bajo, Madrid (España)

20. AURELIO GARCÍA ANTON (AURELIO MARÍA), clérigo profeso de los Carmelitas de la Antigua Observancia
nacimiento: 14 Agosto 1916 en Navacepeda de Tormes, Ávila (España)
martirio: 18 Agosto 1936 en Carabanchel Bajo, Madrid (España)

21. FRANCISCO PÉREZ Y PÉREZ (FRANCISCO MARÍA), clérigo profeso de los Carmelitas de la Antigua Observancia
nacimiento: 30 Enero 1917 en Ros, Burgos (España)
martirio: 18 Agosto 1936 en Carabanchel Bajo, Madrid (España)

22. ÁNGELO REGUILÓN LOBATO (ÁNGEL MARÍA), clérigo profeso de los Carmelitas de la Antigua Observancia
nacimiento: 01 June 1917 en Pajares de la Lampreana, Zamora (España)
martirio: 18 Agosto 1936 en Carabanchel Bajo, Madrid (España)

23. NICOMEDES ANDRÉS VECILLA (BARTOLOMÉ FANTI MARÍA), clérigo profeso de los Carmelitas de la Antigua Observancia
nacimiento: 26 Agosto 1917 en Pajares de la Lampreana, Zamora (España)
martirio: 18 Agosto 1936 en Carabanchel Bajo, Madrid (España)

24. JOSÉ SÁNCHEZ RODRÍGUEZ (ÁNGEL MARÍA), clérigo profeso de los Carmelitas de la Antigua Observancia
nacimiento: 02 Agosto 1918 en Pajares de la Lampreana, Zamora (España)
martirio: 18 Agosto 1936 en Carabanchel Bajo, Madrid (España)

25 FRANCISCO MARCO ALEMÁN (ALBERTO MARÍA), sacerdote profeso de los Carmelitas de la Antigua Observancia
nacimiento: 23 Mayo 1894 en Caudete, Albacete (España)
martirio: 28 Noviembre 1936 en Paracuellos de Jarama, Madrid (España)

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SAN ASPRENATO

OBISPO


PALABRA DE DIOS DIARIA

En Nápoles, de la Campania, san Asprenato, primer obispo de la ciudad (s. II/III).Muchos napolitanos, por la gran devoción para el patrón principal de la ciudad san Genaro y de su espectacular milagro anual de la licuefacción de la sangre, ha olvidado o hasta ignoran que el primer obispo de la naciente comunidad cristiana de Nápoles fue san Asprenato, mientras san Genaro fue obispo de Benevento y mártir en Pozzuoli en las proximidades de Nápoles. 

De san Asprenato se sabe que vivió entre finales del siglo I y principios del siglo II, época en que los más recientes estudios arqueológicos, fijan los principios de la Iglesia napolitana, y como confirmación de esto, se sabe que el nombre Asprenato fue muy popular en el período de la república y en los primeros tiempos del imperio romano, luego cayó en desuso.

Varios antiguos documentos comprendidos en el famoso Calendario Marmóreo de Nápoles, certifican su existencia durante los mandatos de los emperadores Trajano y a Adriano y fijan en veintitrés años la duración de su episcopado. 

De su vida no se sabe nada cierto, pero una antiquísima leyenda repetida con modificaciones en textos posteriores, cuenta que san Pedro, fundada la Iglesia de Antioquía, se encaminó hacia Roma con algunos discípulos, pasó por Nápoles, aquí encontró una viejecita enferma (identificada luego como santa Cándida La Anciana), quien prometió adherirse a la nueva fe si se curaba.

Pedro hace una oración pidiendo la sanación, a lo que los discípulos de Antioquía contestaron con ¡Amén!, Cándida se sanó, y encomienda cure también a un amigo suyo llamado Asprenato enfermo desde hace tiempo y que si lo curara también ciertamente se convirtiría. 

En este instante Pedro también intercede y logra que sea curado, y luego de catequizarlo, lo bautiza. El cristianismo vivía una rápida difusión en Nápoles, y cuando Pedro decidió retomar el viaje hacia Roma, consagro a Asprenato como obispo.

Él hizo construir el oratorio de Santa María del Principio sobre que surgirá la basílica de santa Restituta y fundó la iglesia de san Pedro en Aram donde todavía hoy se conserva el altar sobre el que el apóstol celebró el Sacrificio. 

El santo obispo murió rico en méritos, y varios milagros fueron conseguidos por su intercesión; su cuerpo fue llevado al oratorio de santa María del Principio, algunos estudios más recientes dicen que las reliquias están en las catacumbas de san Genaro, en cuyos alas superiores están las imágenes, no bien conservadas, de los primeros 14 obispos napolitanos.

Después de san Genaro es el segundo de los 47 santos protectores de Nápoles, cuyos bustos de plata son custodiados en la capilla del tesoro de san Genaro en la Catedral (el Duomo), aquí también esta conservado el bastón con el que san Pedro lo curó. 

En la ciudad, en épocas diferentes, fueron elegidas dos iglesias en su honor y una capilla le es dedicada en la antiquísima basílica de santa Restituta. 

Es invocado para calmar la jaqueca, su fiesta litúrgica es recordada en el Martirologio Romano y en el Calendario Marmóreo al 3 de agosto.