07/09/20

11:49 p.m.

Por: P. Felipe Santos | Fuente: Catholic.net

Monje y Arquitecto

Martirologio Romano: En Perugia, de la Umbría, san Pedro Vincioli, presbítero y abad, que reedificó una antigua iglesia dedicada a san Pedro que amenazaba ruina, y a ella unió un monasterio en el que, venciendo gran oposición y con gran paciencia, introdujo los usos y costumbres cluniacenses (1007).

Etimológicamente: Pedro = Aquel que es firme como la piedra, es de origen latino.

Breve Biografía


Uno de los monumentos más importantes de Peregia es la iglesia de san Pedro. Se ve a distancia en virtud o gracias a su campanario octogonal. Representa realmente algo bello con las líneas renacentistas del 1400 y 1500.

Pero lo más antiguo es la iglesia de san Pedro Vincioli, que vivió en el siglo X. Ya había otra iglesia más pequeña en honor de san Pedro, que fue fundada por san Escolano, Obispo y patrono de Peregia. Era la ciudad un maremagno de paganos y algunos cristianos que rezaban en su pequeña iglesia.

A Pedro le encantaba el arte que armonizaba con su entrega pastoral a todo el mundo. El Papa lo nombró abad de la iglesia y del monasterio al mismo tiempo.

Si hay que definir o entresacar la característica más importante de Pedro, sería, sin duda, su caridad para con los pobres y abandonados de la ciudad.

Estuvo a punto de morir a manos de unos ladrones , pero esta vez se salvó de la muerte que, realmente, le sobrevino de forma natural en el año 17007.

¡Felicidades a quien lleve este nombre!

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11:49 p.m.

Mártir Laico

Martirologio Romano: En Odense, ciudad de Dinamarca, san Canuto, mártir, rey de ardiente celo, que dio gran esplendor al culto en su reino, promovió el estado clerical y asentó sólidamente las iglesias de Lund y Odense, siendo finalmente asesinado por unos sediciosos (1086).

Etimológicamente: Canuto = Aquel que es imprescindible,es de origen germánico.

Patronazgo: de Dinamarca

Breve Biografía


Canuto IV el Santo (en danés, Knud den Hellige) (1040 - 1086) reinó en Dinamarca desde 1080 hasta su asesinato en 1086. Era hijo natural de Sven II rey de Inglaterra. Sucedió a su hermano Harald III Hen.

Desde joven resaltan en él las mejores cualidades para la lucha y posee apreciadas dotes de conquistador. Pelea contra los piratas que destrozan las costas del reino y logra limpiar los mares; sale vencedor en las sangrientas guerras contra los vendos paganos. Crece más y más su estima entre el pueblo. Pero a la muerte de su padre usurpa el trono su hermano Harald porque la nobleza prefiere un rey flojo y estúpido, que muere a los dos años. Entonces es cuando sube al trono Canuto, corriendo el año 1080.


Se esfuerza por restablecer las buenas costumbres ya que se ha encontrado con un reino que aún sufre los tropiezos del paganismo. Purga al pueblo de vicios y desórdenes. Guerrea contra Estonia y añade a Dinamarca los territorios de Curlandia y Samogitia. Parece que no por ambición, sino por piedad; de hecho, inmediatamente manda misioneros que evangelicen a los habitantes de esas tierras.

Como suele suceder en un rey, se casó con Adela, hija de Roberto, conde de Flandes, de quien tuvo a Carlos el Bueno.

Dispone las cosas del reino con leyes humanas, sabias y prudentes. Hace por los menesterosos, construye hospitales, su tesoro es para los pobres. Favorece la misión de la Iglesia con la construcción de templos y patrocinando monasterios.

Precisamente la cuestión de los diezmos le indispone con los nobles. Intenta desarraigar en el pueblo la mala costumbre de atribuir únicamente a los pecados de los clérigos la causa de las calamidades que periódicamente afligen al pueblo, las enfermedades, catástrofes y todo tipo de desórdenes naturales.


Por su parte, adopta actitudes penitenciales. Tiene una piedad grande que le lleva a traer después de invadir Inglaterra, las reliquias de san Albano. Entre todas las actitudes religiosas destaca su amor y veneración por la Eucaristía. Sinceramente es capaz de poner a los pies de Cristo crucificado su espada, su corona y las insignias reales ¡y lo hace!

Es traicionado por su hermano Olao. Un día que asiste a la Misa en Odense, en la isla de Fünen y en la iglesia de san Albano, acompañado por algunos leales, los rebeldes capitaneados por Blacon rodean la Iglesia. Después de haber confesado y comulgado, muere asaeteado, perdonando a sus enemigos. Fue un 10 de enero del 1087. Es canonizado y proclamado primer santo de Dinamarca el año 1.100. El Papa Clemente X reconoce su culto para toda la Iglesia.

En nuestra época puede resultarnos extraña la figura de un santo rudo, peleón, invasor de tierras extrañas y exigente sin contemplaciones. Parece convencernos más su bondad con los pobres, su compasión con el débil, su piedad y penitencia. Pero él hizo lo que pudo para ser leal consigo mismo, bueno con su pueblo y fiel con la Iglesia. Eso era lo que le pedía el siglo de hierro, aquel oscuro tiempo bárbaro y turbulento.

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11:49 p.m.

Por: P. Felipe Santos | Fuente: Catholic.net

Virgenes y Mártires

Martirologio Romano: En Sabina, santas Anatolia y Victoria, mártires († c. 250).

Etimológícamente: Victoria = Aquella que resulta vencedora, es de origen latino
Etimológicamente: Anatolia = amanecer, es de origen griego.

Breve Reseña


Estas dos chicas eran muy amigas. Victoria tenía novio y se iba a casar pronto con él.

Quería que Anatolia, también muy guapa, hiciera los mismo. Incluso Eugenio, novio de Victoria, quiso buscarle un novio.

Pero ella insistía una y otra vez:" Es inútil que me lo digáis. No me casaré nunca".

Su amiga le contestaba que san Pedro estuvo casado y que los sacerdotes enseñan que el matrimonio es agradable al Señor.

Y ella repetía:"Le es más agradable la virginidad".

¿Cómo lo sabes?, volvía a preguntarle.
Y respondía: "Me lo ha dicho mi ángel de la guarda".

Se le apareció el ángel y le dijo: "El matrimonio es bueno, pero la virginidad es mejor; el matrimonio es de plata y la virginidad es de oro".

Estas palabras conmovieron tanto a Victoria que, desde ese instante, dejó aparte su noviazgo para seguir virgen.

Entonces, los dos jóvenes encerraron a las dos hermanas en sus casas de campo respectivas y trataron de vencerlas por el hambre. Pero al no obtener los resultados deseados las denunciaron al emperador por ser cristianas.

Todo razonamiento resultó inútil. Desesperado el novio, se lanzó sobre Anatolia y la estranguló.

El novio de Victoria quería ganársela con regalos.

Pero como seguía empeñada en su virginidad, le dijo al gobernador que enviase al verdugo para que le diese muerte.

Son dos mártires de los primeros siglos. Su martirio tuvo lugar entre Roma y Rieti.

¡Felicidades a quien lleve estos nombres!

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5:10 p.m.
SAN CRISTÓBAL DE LICIA

MÁRTIR






Patrono de los viajeros, transportistas y conductores
Mártir


Etimológicamente: Cristóbal = Aquel que es el Portador de Cristo, es de origen griego

San Cristóbal, popularísimo gigantón que antaño podía verse con su barba y su cayado en todas las puertas de las ciudades: era creencia común que bastaba mirar su imagen para que el viajero se viese libre de todo peligro durante aquel día. Hoy que se suele viajar en coche, los automovilistas piadosos llevan una medalla de san Cristóbal junto al volante.


¿Quién era? Con la historia en la mano poco puede decirse de él, como mucho que quizá un mártir de Asia menor a quien ya se rendía culto en el Siglo V. Su nombre griego, «el portador de Cristo», es enigmático, y se empareja con una de las leyendas más bellas y significativas de toda la tradición cristiana. Nos lo pintan como un hombre muy apuesto de estatura colosal, con gran fuerza física, y tan orgulloso que no se conformaba con servir a amos que no fueran dignos de él.

Cristóbal sirvió primero a un rey, aparente señor de la tierra, a quién Cristóbal vío temblando un día cuando le mencionarón al demonio.

Cristóbal entonces decidió ponerse al servicio del diablo, verdadero príncipe de este mundo, y buscó a un brujo que se lo presentará. Pero en el camino el brujo pasó junto a una Cruz, y temblando la evitó. Cristóbal le pregunto entoncés si él le temía a las cruces, contestandole el brujo que no, que le temía a quién había muerto en la Cruz, Jesucristo. Cristóbal le pregunto entonces si el demonio temía también a Cristo, y el brujo le contestó que el diablo tiembla a la sola mención de una Cruz donde murió él tal Jesucristo.

¿Quién podrá ser ese raro personaje tan poderoso aun después de morir? Se lanza a los caminos en su busca y termina por apostarse junto al vado de un río por donde pasan incontables viajeros a los que él lleva hasta la otra orilla a cambio de unas monedas. Nadie le da razón del hombre muerto en la cruz que aterroriza al Diablo.

Hasta que un día cruza la corriente cargado con un insignificante niño a quien no se molesta en preguntar; ¿qué va a saber aquella frágil criatura? A mitad del río su peso se hace insoportable y sólo a costa de enormes esfuerzos consigue llegar a la orilla: Cristóbal llevaba a hombros más que el universo entero, al mismo Dios que lo creó y redimió. Por fin había encontrado a Aquél a quien buscaba.

--¿Quién eres, niño, que me pesabas tanto que parecía que transportaba el mundo entero?--Tienes razón, le dijo el Niño. Peso más que el mundo entero, pues soy el creador del mundo. Yo soy Cristo. Me buscabas y me has encontrado. Desde ahora te llamarás Cristóforo, Cristóbal, el portador de Cristo. A cualquiera que ayudes a pasar el río, me ayudas a mí.

Cristóbal fue bautizado en Antioquía. Se dirigió sin demora a predicar a Licia y a Samos. Allí fue encarcelado por el rey Dagón, que estaba a las órdenes del emperador Decio. Resistió a los halagos de Dagón para que se retractara. Dagón le envió dos cortesanas, Niceta y Aquilina, para seducirlo. Pero fueron ganadas por Cristóbal y murieron mártires. Después de varios intentos de tortura, ordenó degollarlo. Según Gualterio de Espira, la nación Siria y el mismo Dagón se convirtieron a Cristo.

San Cristóbal es un Santo muy popular, y poetas modernos, como García Lorca y Antonio Machado, lo han cantado con inspiradas estrofas. Su efigie, siempre colosal y gigantesca, decora muchísimas catedrales, como la de Toledo, y nos inspira a todos protección y confianza.

Sus admiradores, para simbolizar su fortaleza, su amor a Cristo y la excelencia de sus virtudes, le representaron de gran corpulencia, con Jesús sobre los hombros y con un árbol lleno de hojas por báculo.

Esto ha dado lugar a las leyendas con que se ha oscurecido su vida. Se le considera patrono de los transportadores y automovilistas.

Su festividad en la actualidad es el 10 de julio, antiguamente se lo festejaba el 25 del mismo mes.